Un instante





Cuando ha sido la última vez que has sentido "miedo"


-en este instante-


Qué te está sucediendo para sentir miedo


-pienso en ello-


Estas acompañada


-estoy sola-


Cuando piensas en el miedo, como lo ves


-no lo veo, lo siento-


Te voy a decir una cosa... siento mucho cariño por ti


-perdona, pero de que me sirve a mí tú cariño ahora-


Te digo otra cosa...Todo este cariño que siento por ti y sabes que es cierto, lo recibes en este instante.


-déjame que lo dude-


Te aseguro que estoy pensando en ti con mucha ternura, acaso lo dudas


-No, te creo no tienes por qué decirme cosas que no son-


Bien, empezamos a tener ingredientes comunes


-cuales-


Curiosamente mi cariño va creciendo hacía ti a medida que me escuchas, a medida que me dejas estar contigo.


-No estás conmigo, estoy sola-


Te sientes sola, yo estoy compartiendo contigo mi cariño y recibo el tuyo.


-sola no me siento, estamos hablando, aunque me cuesta recibir lo que me envías-


Bien, te cuesta...muy bien, me siento alegre de que te cueste... pronto te resultara más fácil.
Siempre he creído en ti, sé de tu grandeza, sé de tus inquietudes y también sé que pocas veces hablas conmigo de esta manera entrañable en que ahora lo hacemos.


-No sé de qué me hablas-


No importa, te quiero demasiado y en mi amor silencioso, hoy a gritos, te digo que te esperare;


-no te entiendo-


Me esperare a que me respondas...Me esperare a que dejes ir todos los atadillos llenos de confusión...Me esperare a que quieras ver...Me esperare porque tú así lo quieres y mientras tanto no dudes que te envío mi amor.


-qué atadillos, qué tengo que ver, me estas liando-


Sabes que no es así...ya que para liarte te bastas tú sola, y dime cómo va el miedo.


-Ahora no pienso en el miedo, bastante tengo con lo que me dices-


Bien muy bien, lo ves... estas empezando a ver... Eres tú misma que te invitas a sentir un estado u otro, eres tú que escoges quedarte con una emoción o expulsarla. Es tu atención la que despejara las nieblas y te ira llevando al otro lado de la moneda. Del miedo al bienestar, del miedo al amor, y para ello has de usar la misma fuerza de atención, has de desarrollar la misma imaginación sólo que esta vez en el sentido correcto, en el bienestar, en el pensar positivo. Como ves, es la misma moneda, solo que tú escoges que quieres, y esto es algo que sólo tú puedes hacer.
Hasta ahora te has creído todo lo que te han dicho o casi todo, y te has formado una idea de ti, de cómo eres, de cómo haces las cosas, de cómo debes hacerlas, de que esperan los demás de ti, de que eres una persona simpática o no, etcétera.


-Si claro, al menos eso es así, yo sé cómo soy-


Bien, recuerdas la típica frase de "Sólo sé que no se nada" de Sócrates, pues se trata de eso precisamente, y es ahí donde lo que de todas todas has de desprenderte, dentro de esa nada, de todas las etiquetas que te han asignado y que has asignado... y empezar a sentir que escribes un nuevo sentido de tu existencia, la cual está llena de toda tu nueva imaginación positiva, y de todo mi amor pues ya sabes que te espero y mientras te envío y recibes.


-Vale, vere lo que puedo ir haciendo, pero entenderás que, entre que no sé nada y que lo que creo saber tampoco me sirve, me estoy quedando bastante confusa. También te digo que hoy con todo esto no tengo tiempo para pensar en el miedo.


Bien, muy bien...


-Perdona, pero tengo que ir a cenar, continuaremos otro momento-


Cuando tú quieras, sabes que dulcemente te espero.
Hasta luego, Nuria



💗